La Cooperativa Apícola El Chañar avanza exitosamente en sus tareas y enviará su producto terminado desde EMIXA a mercados internacionales.
“Hemos vendido tres equipos de tambores a un acopiador cuyo destino será EEUU, y esperamos completar una carga más dentro de poco” dijo orgullosamente Alberto García Carbajo, Presidente del Consejo Departamental Apícola, esto se dio gracias al aporte de EMIXA mediante la cual se logró una sala habilitada por SENASA, “esto nos permite cumplir con los controles de la entidad, cada tambor tiene un número de sala y del Registro Nacional para Apicultores, donde se individualiza la sala y también permite saber de qué productor es el tambor, lo que garantiza la calidad”.
Esta es una primera etapa ya que se está en proceso de tecnificación, además se concretó el pago de una sala de fraccionamiento, “esto que se ve acá es un producto cotizado en 42 pesos por kilo, pero la idea es obtener el valor agregado que se lo da el fraccionamiento”. En nuestro País la mayor parte de lo exportado va dirigido a Europa y EEUU, pero sale a granel, “pero lo que tenemos que conseguir es ir por el valor agregado”.
Todo esto hubiese sido imposible de realizar si no se contaba con el respaldo de EMIXA, “el establecimiento es la piedra fundamental, esto es un proceso para poder agregar valor al productor, es un producto con una fortaleza importante que se puede guardar en un galpón, y lo que pretendemos es que esto le sirva a cualquier productor de la provincia” aclaró García Carbajo, quien invitó a todos los apicultores a participar.
Actualmente la Cooperativa Apícola El Chañar cuenta con 15 socios y con cuatro más que están a prueba, según indica el estatuto de la cooperativa. Desde que se cuenta con esta infraestructura se han obtenido dos millones de pesos, “esto es de la venta a granel, pero buscamos lograr el valor agregado”.
Santiago Varas es apicultor y el responsable de la sala de extracción, “identificamos los tambores para que el acopiador tenga la trazabilidad de la miel que se fabrica en nuestro departamento” dijo, para que el producto sea aprobado por SENASA se deben cumplir con ciertos requisitos, que los envases sean aprobados e identificados con código de barra, “gracias a esta sala se puede lograr la trazabilidad requerida”.
En cuanto a los estándares de calidad, la miel local cuenta con lo requerido por el comercio internacional, realizando un manejo de buenas prácticas en los apiarios y cumpliendo los protocolos pedidos por el SENASA en la sala. “La perspectiva de la Cooperativa es llegar a la mayor cantidad de productores, que toda la gente que realiza esto de forma manual lo haga acá y tenga acceso a los mercados internacionales”.
La venta siempre fue un cuello de botella para la rentabilidad del producto, ya que se debía acudir a intermediarios, sin embargo, gracias a EMIXA y a la asociatividad, esto cambió ya que se pueden reunir volúmenes atractivos para los compradores. “También tratamos de producir otros subproductos como propóleo, polen y otros”
De esta manera EMIXA sigue logrando resultados para los productores que participan en ella, en este caso para los apicultores asociados en la Cooperativa El Chañar, pero que luego se traduce en beneficios para el departamento.